Al igual que los termómetros, pasado el calor, la presión del inflado de los neumáticos desciende. Un dato curioso es que esta presión puede llegar a bajar medio kilo por cada descenso de diez grados en la temperatura.
Desde Citycar Talavera recomendamos que pasado el verano se revise la presión de los neumáticos porque de ello depende tu seguridad en la carretera.
Un inflado por debajo de lo recomendado provoca un aumento del desgaste en el borde exterior del neumático. Además, genera un excesivo calentamiento y puede reducir la eficiencia de combustible al aumentar la resistencia a la rodadura.
Conducir con la presión inadecuada disminuye la duración de las gomas y aumenta la posibilidad de que sufras un reventón, afecta a la estabilidad de tu coche, corres riesgo de sufrir aquaplaning, la distancia de frenado aumenta y los neumáticos tienen una resistencia mayor a la rodadura lo que significa que el consumo de carburante aumenta.
Por ello, recuerda revisar la presión de tus neumáticos constantemente, ganaras en seguridad, estabilidad y ahorrarás.
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